Entrenamiento personal en chamberí
Funciones del core
1. Estabilizar.
Gracias a esa estabilidad, el sujeto, va a tener la capacidad de controlar, la posición general del cuerpo y el movimiento que se pueda generar en el tronco sobre la pelvis, lo que permitirá producir y transferir fuerzas de una manera óptima y controlada. Por lo que si el core está entrenado, produce estabilidad central, propiciando que las fuerzas se generen desde el centro del cuerpo hacia fuera, de proximal a distal. En el centro, estabilidad y en las articulaciones distales, movimiento. Si tenemos un core estable se minimiza el riesgo de lesión en las extremidades inferiores. (Kibler et al., 2006).
2.Proporcionar seguridad y protección a las articulaciones más alejadas del centro.
El core entrenado genera un “mapa interactivo” o unos ajustes posturales anticipatorios al movimiento que se va a producir entre core y articulación distal. Este mapa interactivo se va a ir modificando en función de la acción a realizar, ya sea, por ejemplo, con los dos pies plantados y un movimiento en un solo plano o con los pies en diferentes posiciones y con un movimiento que se de en varios planos. Esta función, bien trabajada, mejora la generación de fuerzas y minimiza las posibles cargas que se puedan generar en las articulaciones durante el desarrollo de actividad física, ya sea corriendo o lanzando objetos. Por ejemplo, en un golpeo con la pierna, la cadera se flexiona en el momento exacto.
En un lanzamiento, el hombro genera una rotación interna para rotar el brazo, a su vez se da una rotación de tronco y un varo de codo para protegerlo gracias a que el hombro estabiliza el brazo en el momento exacto, para que no haya un torque demasiado grande como para no poder controlar esa fuerza. En estos movimientos se produce un sumatorio de velocidades que incluye la activación del core en todos ellos, controlando desde el mismo las acciones que salen hacia las extremidades.
3.Generar y transmitir fuerzas.
La relación existente durante el entrenamiento de fuerza entre miembro inferior y superior se da a través del core. Mediante el conjunto de músculos que rodean la rodilla, el core y los hombros. Todos ellos trabajan de manera conjunta, como cadena cinética. Además, se ha visto una fuerte relación entre el core y los músculos de la cadera. (Kibler et al., 2006). También se puede afirmar que el control y la estabilidad, propician una mejor efectividad en la generación de fuerzas desde el core hacia las piernas, por lo que la secuencia de movimiento se iniciaría en el core. Todos los músculos que conforman el core participan en el gesto activándose constantemente antes de realizar un ejercicio de piernas exceptuando los erectores espinales. (Behm, Leonard, Young, Bonsey & MacKinnon, 2005).
4. Ejemplo.
Si quieres ver un ejemplo, selecciona el siguiente enlace donde desarrollo una plancha frontal en Rebel Gym, ubicado en Chamberí.